La carcinomatosis peritoneal corresponde a la diseminación o extensión en la cavidad peritoneal de un cáncer originado en algún órgano o viscera del abdomen, generalmente asociado a tumores digestivos o ginecológicos. También puede presentarse en forma primaria en patologías como el mesotelioma y el adenocarcinoma primario peritoneal. Las imágenes anatómicas son el pilar de la evaluación de las siembras peritoneales, pero pequeños implantes neoplásicos pueden ser difíciles de detectar con TAC o resonancia magnética. El PET/CT 18F-FDG tiene el poder de mejorar la detección de las metástasis peritoneales. Está indicado en pacientes con marcadores tumorales elevados, con imágenes anatómicas negativas o no conclusivas y en pacientes seleccionados para citorreducción completa. Se suma a las imágenes convencionales en la detección y estadificación de la carcinomatosis peritoneal, y es una herramienta diagnóstica útil en el monitoreo de la respuesta a la terapia y en el seguimiento a largo plazo.
Peritoneal carcinomatosis is the dissemination or extension in the peritoneal cavity of a cancer originated in some organ or abdominal viscera, generally associated with digestive or gynaecological neoplasms. It can also occur in primary form, as in mesothelioma and primary peritoneal adenocarcinoma. Anatomical images are essential for the evaluation of peritoneal seeding, but small neoplastic implants can be difficult to detect with CT or MR imaging. PET/CT 18F-FDG can improve the detection of peritoneal metastases. It is indicated in patients with elevated tumour markers, with negative or inconclusive anatomical images, and in patients selected for complete debulking. PET/CT 18F-FDG adds to conventional images in the detection and staging of peritoneal carcinomatosis, and is a useful diagnostic tool in monitoring the response to therapy and in long-term follow-up.
El diagnóstico precoz del compromiso peritoneal en la patología maligna es importante para evitar laparotomías innecesarias y para seleccionar a los pacientes en quienes es factible una citorreducción completa
El 2-(Flúor 18) fluoro-2-desoxi-D-glucosa (FDG) Tomografia de Emisión de Positrones (PET, por sus siglas en inglés) detecta el aumento del metabolismo de la glucosa asociado a lesiones neoplásicas y proporciona una alta precisión en la mayoría de las aplicaciones de imágenes en cáncer. El desarrollo y uso de los equipos híbridos PET-CT permite obtener datos anatómicos y funcionales en un único examen y mejora la capacidad de localizar las lesiones, dando como resultado una mejor aproximación diagnóstica
El PET/CT 18F-FDG tiene el poder de mejorar la detección de las metástasis peritoneales, debido a la elevada actividad metabólica de la lesión y la baja actividad de fondo
En el PET/CT 18F-FDG, los implantes peritoneales aparecen como masas de tejidos blandos nodulares, con incremento de la actividad metabólica; como nódulos neoplásicos que pueden conformar masa y recubrir visceras abdominales
La
Figura tomada de: Chamokova B, Ciolina M, Pichi A, lannitt M, Baldassari P, Cavallini C, et al. Imaging of Peritoneal Carcinomatosis: A prospective study to define correlation between surgical and radiological Peritoneal Cancer Index in patients before HIPEC and Peritonec-tomy. - EPOSTM. ECR 2015 / C-2528. 2015. Available from:
Los principales sitios de crecimiento de las metástasis siguen el camino del flujo ascítico y son: el fondo de saco de Douglas, el mesenterio del intestino delgado, la unión ileocecal, la fosa hepatorrenal y el espacio subfrénico derecho. El fondo de saco de Douglas es la estructura con mayor pendiente de gravedad de la cavidad peritoneal y está involucrado en más del 50% de casos, mientras que el mesenterio del intestino delgado, lo está en más del 40%. Los recesos peritoneales de la grasa mesentérica favorecen la siembra de células malignas en los bordes mesentéricos de las asas ileales y la propagación ocurre de una grasa mesentérica ileal a otra, a lo largo del eje del mesenterio del intestino delgado hacia la unión íleo-cecal y la pelvis. La gotera para-cólica izquierda está involucrada en cerca del 18% de casos ya que el mayor flujo de la pelvis se encuentra por encima de la gotera paracólica derecha y los implantes neoplásicos pueden ocurrir a lo largo del ciego y del colon ascendente
Los implantes neoplásicos también se presentan en la fosa hepatorrenal, ya que en la posición supina, es la parte más baja del surco paravertebral y se comunica con el espacio subfrénico derecho y la gotera paracólica derecha. El tumor abdominal también puede diseminarse al hemitórax derecho debido a las conexiones entre el espacio subfrénico y la pleura derecha a través del diafragma (
El epiplón mayor es rico en tejido linfoide, absorbe líquido peritoneal y es un sitio frecuente de siembras neo-plásicas. En la afectación del omento, el PET/CT 18F-FDG muestra engrosamiento de este, hiperdensidad, y nodularidad, con captación elevada y difusa de FDG (
Las masas neoplásicas peritoneales o mesentéricas pueden comprometer las asas intestinales adyacentes, ocasionando obstrucción intestinal. La extensión neoplásica en la cavidad peritoneal frecuentemente causa ascitis y la presencia de esta permite la diferenciación de implantes neoplásicos sobre la viscera o el peritoneo parietal (
El PET/CT presenta falsos negativos cuando hay lesiones quísticas, enfermedad de pequeño volumen "subcentimetrico" o compromiso peritoneal miliar. Se pueden evidenciar falsos positivos en casos relacionados principalmente con la actividad intestinal y actividad urinaria focal en uréteres y vejiga
En conclusión, el conocimiento de las características anatómicas de la cavidad peritoneal y de la patogénesis del compromiso intraperitoneal de los tumores malignos es esencial para localizar y definir correctamente la presencia de enfermedad peritoneal. Por medio del PET/CT 18F-FDG se puede lograr identificar el compromiso a nivel del peritoneo permitiendo mejoras en la toma de decisiones relacionadas con el tratamiento (cirugía o quimioterapia) y también puede ser usado para monitorizar la respuesta a la terapia y en el seguimiento a largo plazo.
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.